La responsabilidad del Hijab para la mujer y para el hombre.

Assalamu Alaykum Wa Rahmatullahi Wa Barakatuh

La responsabilidad del Hijab para la mujer y para el hombre.

Vamos a escudriñar los asuntos importantes que se requieren para ambos sexos con el fin de especificar la diferencia de responsabilidad entre ellas en relación con este marco de hijab islámico.

Los dos, hombre y mujer, son responsables según el siguiente verso del Sagrado Corán:

"Di a los creyentes que bajen la vista con recato y que sean castos. Es más correcto. Alá está bien informado de lo que hacen. Y di a las creyentes que bajen la vista con recato, que sean castas y no muestren más adorno que los que están a la vista, que cubran su escote con el velo y no exhiban sus adornos sino a sus esposos..." (Corán 24: 30-31)

Los grandes juristas (fuqaha) han citado explicaciones para estos edictos:

A. Una mujer debe cubrir su cuerpo y su pelo de la vista de hombres no mahram (familiares).

B. No es legal para un hombre mirar al cuerpo y al pelo de una mujer no mahram (familiar) a excepción de su cara y sus manos. También es ilegal para un hombre mirar su pelo y este veredicto también se aplica a una mujer en lo que concierne mirar a hombres que no sean su padre, hijo, tio, abuelo, hermano y familiares.

C. Es legal para un hombre que se quiera casar con una mujer mirarla con el fin de familiarizarse con sus cualidades físicas y vice versa.

E. Es legal para los dos, un hombre y una mujer, mirar al cuerpo de sus mahrams (familiares) (excepto los genitales) siempre y cuando no sea con deseo sexual, pero mirar con deseo sexual está prohibido (haram) ya sea mahram o no.

F. Es obligatorio para una mujer cubrir su cuerpo y su pelo de la vista de hombres no mahram (por ejemplo, aquellos con los que ella se puede casar legalmente).

G. Es ilegal para un hombre estar solo con una mujer no mahram en un lugar donde nadie más puede entrar si temen que podrían cometer actos ilícitos (haram); pero no hay objeción para un hombre estar a solas con una mujer no mahram cuando otros no tienen prohibido entrar al lugar, incluso si el otro es un niño maduro racional o en el estado de seguridad de cometer actos de corrupción.

H. El ilegal para un hombre no mahram tocar a una mujer no mahram, ni una mujer no mahram puede tocar a un hombre no mahram, como darse las manos y todo lo demás.

I. Si hay alguna necesidad para que un hombre toque a una mujer y vice versa, como una cura médica o salvar a una persona que se ahoga, y no hay una doctora para la mujer o un doctor para el hombre, es legal para los dos lados tocarse o mirarse para las pruebas, curas o similar.

J. Es legal para un hombre no mahram oir la voz de una mujer no mahram con la condición que escucharla no sea con deseo sexual o una causa para cometer actos haram y está permitido para una mujer hacerse oir en un discurso o al dirigirse a hombres no mahram con la condición de que su voz no desvíe ni seduzca a los que escuchan, porque es haram para una mujer hablarle a los hombres de forma emocionada y agitada.

K. Es recomendable para una mujer guardar su belleza y elegancia para su marido porque el atractivo y la belleza representa un lado importante de la vida de una mujer y una fuente esencial de entre las fuentes de la felicidad de la vida matrimonial.

L. Está prohibido para una mujer imitar a los hombres (al vestirse, al actuar o por el comportamiento)

M. Está prohibido para una mujer perfumarse y salir de su casa, por ejemplo, está prohibido que su perfume sea percibido por hombres no mahram mientras pasa entre ellos o se mezcla con ellos.

Si examinamos con cuidado estas responsabilidades legales que caen bajo el marco del hijab Islámico, encontramos que los dos, hombres y mujeres, comparten la tarea de la responsabilidad en lo que se refiere a esta regla, con la especificación que concierne a las mujeres de cubrir su cuerpo. Esto muestra fuertemente que el Islam aspira a establecer relaciones limpias entre los dos géneros; difunde la pureza y la dignidad entre las personas; y salvaguarda a la sociedad con relaciones sanas. No está entre sus intenciones la de deshonrar la dignidad de una mujer entre las personas o impedirle realizar su papel en la vida como se ve claro en las leyes mencionadas arriba acerca del hijab Islámico.

Si queremos juzgar estrictamente la cuestión de cubrir el cuerpo de una mujer y hemos dicho que es correcto decir que los dos, hombre y mujer, tienen la misma tarea en el marco general del hijab Islámico, surge la pregunta: ¿Por qué colo la mujer soporta la carga de cubrir su cuerpo sin que el hombre tenga que hacerlo?

El hecho, el cual ninguna persona imparcial puede dudar, es que la razón por la especificación de cubrir el cuerpo de una mujer se relaciona con su cualidades sentimentales y físicas. Porque el lado atractivo de una mujer es mucho más fuerte que el de un hombre; ella tiene un lado apto para la sensibilidad; y tiene tendencias instintivas de mostrarse. Por tanto, los adornos y el embellecimiento está entre sus primeras especificaciones. Si no fuesen restringidas, ella podría causar, a sabiendas o no, que una persona inocente cometa un acto, pensamiento o acción haram.

Las características naturales de una mujer y la cual la hace más apta para atraer, tentar y fascinar a los hombres hacia ella misma, es la mayor razón por la que el Islam aborda este punto a través del hijab. Por lo tanto, no es normal pedirle a un hombre que cubra su cuerpo como ella; visto que un hombre en general no posee esas características específicas, ni es propenso a decorarse a sí mismo para llamar la atención de las mujeres.

Aun así, el Islam requiere que el hombre se vista de manera adecuada así como no exponer partes innecesarias de su cuerpo.

Sobre el tema de la atracción, existen dos cosas seguras, una en una mujer y otra en un hombre. Eso que existe dentro de una mujer es el deseo de mostrarse, es parte de su naturaleza. Eso que existe dentro de un hombre es la inclinación a mirar, no solo mirar sino flirtear y recibir placer por ello. Las dos cosas existen. Will Durant dice que no hay nada en el mundo más firme y perseverante que el deseo de un hombre de mirar a una mujer.

También está claro que los hombres y las mujeres son estimulados sexualmente de formas diferentes. Una mujer, siendo una criatura naturalmente sensible y tierna, requiere movimientos conmovedores y táctiles para estimularla. Un hombre, por otro lado, es una criatura más basta, dura y viril con una fuerte imaginación. Puede ser estimulado por una mera mirada. Un mujer se cubre a sí misma para que no exponga su cuerpo y para que el hombre no pueda ver nada que le estimule sexualmente. ¡Qué inteligente es el Islam al adoptar el hijab en la sociedad! Se ajusta completamente con la naturaleza innata de la mujer.

De acuerdo con esta realidad de atracción, vemos que el Islam también prohíbe actos tales como la sodomía entre los hombres y el lesbianismo entre las mujeres por que cada uno de los dos decretos tienen sus propios temas como otros decretos legales los cuales dependen de ciertos fondos necesarios para ellos.

Estos son los verdaderos centros que se abordan con el fin de construir este edicto positivo; el hijab islámico bendito.

Disculpen la traducción, no es de las mejores que he hecho.

Aishah Aish